Matcha Irozi nace en el umbral de un jardín japonés: una invitación a la introspección, a la calma suspendida entre mundos, donde la mente se desplaza a un lugar fuera del tiempo. La fragancia evoca un espacio tradicional y onírico, delicadamente revestido de seda, donde cada gesto parece bailar sobre el borde de una hoja imaginaria. De esta escena surge una acuarela contemporánea y refinada, teñida de tonos pastel y matices vegetales.
Su carácter juega con lo quimérico: ¿una rosa acuosa imposible?, ¿la estela efervescente de un té negro con eucalipto?, ¿el susurro de flores blancas? En esta ambigüedad reside su fuerza; una composición que trasciende orden, género y categoría, construyendo un lenguaje propio.
Pirámide olfativa
Salida
Cardamomo, cídrato, aceite esencial de buchu de Sudáfrica, aceite esencial de bergamota italiana.
Corazón
Té matcha, flores blancas, aceite esencial de eucalipto chino, aceite esencial de geranio egipcio, almizcle.
Fondo
Rosa, sándalo, ámbar blanco.
Perfumista
Pierre Flores.
Extracto de perfume 100 ml
Notas protagonistas
Té matcha, cardamomo, flores blancas, eucalipto, ámbar blanco.